Alimentación saludable

La alimentación sana, el cálculo de ingesta calórica, el control de la composición corporal o conocimientos básicos de una dieta equilibrada, son aprendizajes que el alumnado que cursa Educación Física debe adquirir por real decreto y como tales, serán evaluados a través de ciertos criterios de evaluación e instrumentos.

¿Examen teórico? Uffff que aburrimiento ¿Por qué no hacemos algo más divertido? Cumplimenta este formulario y elije tu mismo la forma que prefieres ser calificado de estos contenidos.

Desayuna con tu profesor. La mejor forma de empezar el día es realizando un desayuno saludable. Para que puedas comprobar por ti mismo que en preparar un desayuno saludable se tarda menos de cinco minutos, aquí tienes a uno de tus profesores en plena acción. Toma nota y "demuéstrate" a ti mismo que tú también puedes preparar un desayuno saludable.

Elabora un vídeo similar a este, en grupo, con tus compañeros, con tu familia, como quieras, poniendo como ejemplo un desayuno saludable o demostrando que sabrías prepararlo. Puedes hacer el vídeo como si de un cortometraje se tratara con voz o cine mudo. Demuestra tus habilidades como editor de vídeos y deja con la boca abierta a tu profesor. Lo mejores cortometrajes serán presentados a concurso y el mejor cortometraje será galardonado con un GRAN RECONOCIMIENTO SOCIAL y algún regalo sorpresa. Ánimo, tú puedes!!!

Visualiza el vídeo y contesta a las 4 preguntas que se plantean en él.

Existen numerosos estudios que ponen de manifiesto los beneficios que una alimentación sana y equilibrada posee a nivel metabólico, pero además y lo que es aún más novedoso, gracias a la neurociencia, los beneficios que posee tener una buena alimentación a nivel cerebral.

El Catedrático de Fisiología Francisco Mora (2010) destaca el papel de la alimentación, junto con el ejercicio físico, no fumar o el sueño como pilares fundamentales para retrasar el envejecimiento del cerebro y mejorar la calidad de vida de las personas. Tal y como indica este mismo autor: “comer menos de un modo alternativo, evita la oxidación celular y el envejecimiento del organismo, por tanto, del cerebro”.

Algunos alimentos son vitales para que el cerebro funcione correctamente. Por ejemplo, los ácidos grasos omega 3 que contienen el pescado y determinados alimentos como los vegetales. Se ha comprobado que este nutriente es el mayor componente estructural del cerebro. Si no tenemos omega 3 o el aporte del mismo a nuestro organismo fuera insuficiente, nuestro cerebro nunca podría funcionar de forma eficiente. En palabras del neurólogo Fernando Gómez Pinilla, de la Universidad de UCLA “el omega 3 es un ladrillo básico para el cerebro, sin él pocas cosas podríamos hacer”.

El beneficio del pescado en nuestro organismo está más que demostrado. También el ácido fólico, presente por ejemplo en las espinacas o en la naranja, es una vitamina muy importante para ciertas reacciones químicas del cerebro.

El agua es otro ingrediente básico e imprescindible en una alimentación saludable, propia para un óptimo funcionamiento cerebral. Este hecho, que puede resultar evidente, en muchos centros se contradice no permitiendo por norma, según sus reglamentos de régimen interno, beber agua dentro del aula, durante las sesiones lectivas; algo que no parece muy coherente, cuando sabemos que el agua está vinculada con la atención y mejora del aprendizaje, según B. Ibarrola (2013), citado en Pellicer Royo (2015).

REDES neurociencia, nº 72. “Deporte para un cerebro más sano” https://youtu.be/xT7gwB6Tmow.
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